Si eres de esas personas que alguna vez al mirarse al espejo antes de una cita, reunión ó fiesta, se ha sentido un monstruo, este post servirá para elevar tu autoestima aunque aviso; Sí alguien espera milagros, lo mejor que puede hacer es ir a Lourdes.
Como el Ser Humano aprendió los secretos de la navegación mucho antes de conocer enteramente el planeta, los rumores y leyendas de lejanas tierras habitadas por seres extraños de aspecto monstruoso calaron hondo en la imaginación de aquellos que nunca habían salido de su ciudad, pueblo, aldea ó rocha. Eran tiempos en los que se creía que la tierra era plana y los mares habitados por millones de monstruos marinos y calamares gigantes que engullían barcos de un solo bocado. El invento de la imprenta en 1449 por el ilustre Gutenberg, hizo que aquellos monstruos tomaran forma en mapas, libros, legajos y panfletos y la vistosidad de las imágenes contribuyo aún más a su divulgación.
Con la audacia de los navegantes portugueses y españoles llegó la era de los descubrimientos y de nuevo las historias de lejanos monstruos tomaron protagonismo. A partir del descubrimiento de el Nuevo Mundo en 1492, la fauna imaginaria de los monstruos vivió su época mas dorada. En los puertos, tabernas, plazas y plazuelas de la península e ínsulas, los marinos, aventureros y buscavidas que volvían de América contaban historias de gigantes, hombres sin cabeza ó con un solo ojo, cuadrúpedos con cabeza humana y otros seres increíbles que solo la imaginación humana puede crear, ante un boquiabierto público que escuchaba atento la descripción del nuevo continente descubierto.
Ulisse Aldrovandi era un monstruo (metafóricamente hablando) de la botánica y la zoología, fue uno de los entusiastas gracias a los cuales se creó el jardín botánico de Bolonia, formó parte de varias expediciones para recolectar especies, notario y profesor en la universidad de Bolonia. Publicó varios libros, siendo su obra más conocida «Monstruorum Historia», un libro editado tras su muerte que recopilaba todas aquellas malformaciones tanto en personas como en animales e incluía a aquellos seres monstruosos con los cuales navegantes y descubridores habían inundado la imaginación colectiva. No me queda la menor duda que el tal Ulises era un cachondo, no solo por incluir en su reconocida y seria obra a estos monstruos ficticios deliberadamente en broma, sino porque tengo la impresión que tal vez en sus láminas dibujase la cabeza de algún poderoso personaje de la época en el cuerpo de una gallina ó semoviente similar. Como prueba dejo unas fotos de algunas de las láminas:
Esta última lámina corrobora mi opinión que este tío era un cachondo. Para saber más de Ulisse Aldrovandi os dejo este enlace:
http://es.wikipedia.org/wiki/Ulisse_Aldrovandi
http://es.wikipedia.org/wiki/Jard%C3%ADn_Bot%C3%A1nico_Municipal_Ulisse_Aldrovandi
http://www.filosofia.unibo.it/aldrovandi/
http://science.jrank.org/pages/52944/Ulisse-Aldrovandi.html
Tiene hasta una cuenta en facebook; http://www.facebook.com/maestroaldrovandi
El libro se puede comprar en ebay pero como en cuestión de monstruos una imagen vale más que mil palabras, no dejo enlace pues con mirarnos al espejo… Veremos un libro abierto
Con mis mejores saludos!!!